La combinación de estos 3 pilares: el ratio de alumnos por profesor, la inversión en instalaciones y la historia de esta institución y los valores y principios que inculca en los alumnos, hacen que la experiencia en un boarding school sea una de las más enriquecedoras en la educación de vuestros hijos y desearíamos que tuviesen la oportunidad de disfrutarla.
Los alumnos reciben una atención personalizada por parte de sus profesores y del personal a su cuidado, atendiendo a sus necesidades tanto en el terreno académico como en el personal lo que hace que estudiar en un internado británico sea un privilegio.
Los resultados académicos de los alumnos han sido desde siempre destacados, pero a lo que hoy en día se presta una especial dedicación es a los valores que hay que transmitirles, persiguiendo una formación integral como personas con criterio propio, preparándoles para un mundo global que es la realidad que les toca vivir.
La inversión en métodos de enseñanza y mejora de instalaciones es continua, en laboratorios de ciencias, en arte y en música, en informática y en instalaciones deportivas de primer orden. La ubicación de estos colegios, su entorno y las casas que los conforman, todas ellas con siglos de historia, personifican la tradición de esta institución y crean en los alumnos un sentimiento de orgullo por formar parte de un boarding school.
Las actividades extra-escolares juegan un papel muy importante dentro de un boarding school. Actividades deportivas, artísticas y académicas están todas a disposición de los alumnos que residen en el colegio para que prueben, descubran y desarrollen sus intereses y capacidades.
En un boarding school quieren mentes curiosas, con ganas de aprender porque tienen mucho que ofrecer a estos niños para satisfacer esa curiosidad.
En un boarding school se valora de un modo especial el esfuerzo del alumno por mejorar cada día, su capacidad de relacionarse con los demás y de respeto por el mundo que les rodea y este reconocimiento genera en ellos un sentimiento de orgullo y autoestima muy importante.
Un buen expediente académico es muy importante pero lo es más el bienestar de los niños, que sean felices y de esto se preocupan por encima de todo en un boarding school.
Un niño en un boarding school aprende a ser independiente, a creer en sí mismo, el personal a su cuidado se lo inculca. Los modales, las buenas maneras y el respeto por los demás son exigidos en este tipo de educación.
En un boarding school hay tiempo para estudiar, para investigar, para imaginar, para leer, para jugar, para competir, para pensar…
En un boarding school los niños pueden descubrir ese deporte que jamás imaginarían pudiese convertirse en su pasión.
En un boarding school se crean las condiciones apropiadas para que los niños desarrollen su imaginación.
El mundo de posibilidades que se les pone a su disposición en tantos campos diferentes permite que encuentren aquello en lo que son verdaderamente buenos.
Un boarding school desarrolla en los niños un sueño que perseguir y la fuerza y confianza en sí mismos para conseguirlo.